7 sencillos consejos para afrontar el trabajo desde casa
La pandemia del coronavirus (COVID-19) ha significado grandes cambios de vida para todos nosotros, incluida la adaptación a nuevas formas de trabajar. Si bien algunos de nosotros hemos regresado a nuestro lugar de trabajo normal, muchos todavía están trabajando desde casa o pasando por un regreso gradual.
Trabajar desde casa tiene ventajas que disfrutamos (¡adiós al tráfico y el transporte diario!), pero para muchos de nosotros, cambios como estos también constituyen un desafío.
Sentir estrés, falta de motivación, ansiedad e incertidumbre es completamente normal. Además de esto, muchos de nosotros podríamos estar preocupados por las perspectivas laborales futuras o la mejor manera de encontrar el equilibrio entre el teletrabajo y nuestra vida personal y/o familiar.
Estos sencillos consejos pueden ayudarte a sentirte más productivo y motivado, y a cuidar tu salud mental mientras trabajas desde casa.
Índice
Establece una rutina y mantenla
Sin horarios fijos, las líneas entre el trabajo y el tiempo personal pueden volverse borrosas y al no estar delimitadas te pueden provocar altos niveles de estrés.
Trata de seguir y no cambiar tus patrones habituales de sueño y trabajo, se constante.
Levántate a la misma hora, desayuna, quítate el pijama y vistete como lo haces habitualmente para ir a trabajar. Intenta calcular cuánto tiempo usualmente te tomaba llegar al lugar de trabajo y dedica ese lapso de tiempo a hacer ejercicio, leer o escuchar música antes de iniciar la sesión de trabajo en casa o teletrabajo.
Lo más importante es que cuando termines tu jornada laboral, dejes de trabajar. Desconecta, deja de revisar los correos electrónicos y concéntrate en tu vida hogareña. Y al final del día, trata de acostarte a tu hora habitual.
Crea un espacio de trabajo dedicado
Si puedes, busca un lugar tranquilo lejos de la gente y las distracciones como la televisión (o la cocina, cuando te entran ganas de picar algo).
Antes de comenzar a trabajar ten todo lo que vas a necesitar a mano, (cargadores, bolígrafos, papel y cualquier otra cosa) y cierra la puerta si puedes. Incluso en un espacio pequeño o compartido, intenta establecer un área para trabajar.
Por último, ponte cómodo. Si bien puede resultar tentador sentarse en el sofá, es mucho mejor sentarse en un escritorio o una mesa. Utiliza las pautas para un ambiente de trabajo saludable, tan ergonómico como sea posible.
Si no tienes muebles de oficina como una silla ajustable, intenta usar cosas como un cojin para apoyarlo en tu silla o una caja como reposapiés.
Date un respiro
Tomarte un tiempo para los descansos es importante para ayudarte a controlar los sentimientos de estrés.
Intenta tomar algún snack y haz descansos regulares que alivien tu vista eso te ayudará a despejarte y mejorará tu concentración cuando retomes la actividad laboral. Incluso solo 5 a 10 minutos de breves descansos cada hora pueden ayudar a mejorar considerablemente tu productividad.
Si es posible, pasa tiempo al aire libre cuando puedas. Pasar un rato en en espacios verdes es excelente para tu salud mental.
Establece una hora para salir a caminar, correr o andar en bicicleta para tomar un poco de aire fresco o tomar un café.
Mantente conectado
Si bien trabajar desde casa tiene sus beneficios, también puede hacerte sentir un poco aislado. Pero hay muchas formas de mantenerse en contacto con aquellos que te importan, de esta manera ayudas a mejorar tu bienestar mental y el de ellos.
Dentro y fuera del trabajo, la interacción humana es importante, así que programa videollamadas y levanta el teléfono en lugar de enviar un correo electrónico o solo mensajes por redes sociales. Si tienes dificultades para trabajar en casa, habla con tus colegas o con el jefe sobre tus inquietudes.
Y recuerda, tus colegas probablemente sientan lo mismo que tu. Pregúntales cómo les está yendo y si hay formas en que puedan apoyarse mutuamente.
Tómete un tiempo para socializar virtualmente: programa una pausa para el café digital o una reunión en línea los viernes.
Establece límites
Establecer límites con otros miembros de tu hogar es clave para el bienestar mental mientras trabajas en casa.
Puedes ser más flexible cuando trabajas desde casa, así que disfrútalo. Pero también puede ser difícil si hay otras distracciones con las que lidiar, como los niños en casa, que pueden pensar que estás de vacaciones y quieren pasar tiempo contigo.
Habla sobre tus necesidades, especialmente con la familia. Recuérdales que todavía tienes trabajo por hacer y necesitas un momento de paz y tranquilidad para hacerlo, es importante que sepan cuando es tu tiempo reservado para trabajar en casa y cuando el de descansar así que comparte con ellos tu horario.
Del mismo modo, establece límites con el trabajo. Es más fácil permanecer todo el tiempo conectado cuando tu casa es tu oficina, pero intenta desconectar cuando termines la jornada laboral y disfruta del tiempo con la familia en casa.
Piensa a más largo plazo
Es posible que continúes trabajando desde casa por un tiempo, así que piensa en las cosas que podrían mejorar tu forma de trabajar mientras está en casa. Si tienes una habitación que es más cálida o tiene una ventana que deja entrar mucha luz, ¿por que no teletrabajar allí?
Intenta explorar cómo trabajan desde casa los demás y que herramientas y recursos usan. ¿Existen diferentes mejores formas de hablar en línea o software nuevo que podría usar?
Se amable contigo mismo
Recuerda, esta es una situación inusual y las cosas no se sentirán normales. Sea amable contigo mismo y reconoce que es posible que no seas tan productivo como lo serías normalmente. Se realista acerca de lo que puedes lograr dadas las circunstancias y relájate cuando termines tu trabajo.
¿Tienes alguna otra idea que quieras compartir y que ayude a mejorar el trabajo desde casa? ¡Nos encantaría que la escribieras abajo en los comentarios!